Internacional

La ola de calor en Europa deja dos muertos en España y un máximo histórico de temperatura en Francia

La ola de calor que sufre estos días Europa está causando estragos.

Un joven de 17 años murió este viernes en España al sufrir un golpe de calor cuando trabajaba en el campo en la sureña región de Andalucía, confirmó el gobierno regional.
El golpe de calor le sobrevino cuando estaba segando en el campo y sintió mareos, tras lo que se metió en la piscina de la finca para refrescarse. Al salir del agua comenzó a convulsionar.

También en España, un anciano de 93 falleció el jueves tras desvanecerse en la calle por un posible golpe de calor en la ciudad de Valladolid, según fuentes de la policía municipal citadas por la agencia EFE.
Además, un trabajador del campo de 45 años se encuentra ingresado en cuidados intensivos en Murcia, en el sureste del país, con síntomas provocados por las altas temperaturas.
Los bomberos luchan además contra un devastador incendio en Cataluña y ocho provincias del país están en alerta roja por el calor.
Por otro lado, Francia ha registrado la temperatura más alta de su historia: 45,1 grados. Fue en la localidad de Villevieille, en el sur.


El máximo histórico anterior fue de 44,1 grados centígrados durante una ola de calor en 2003 en la que murieron varios miles de personas.
El servicio meteorológico del país emitió una alerta roja para cuatro departamentos del sureste, algo sin precedentes.
El calor y las altas presiones han provocado también que la contaminación haya alcanzado niveles elevados en muchas ciudades, incluidas París, Lyon, Marsella, Estrasburgo, Grenoble y Annecy, en las cuales se ha restringido el tráfico.
El primer ministro, Edouard Philippe, afirmó que cada día está muriendo una persona ahogada y alertó que el calor está haciendo que la gente tome riesgos que normalmente no tomaría.

Otros países europeos están experimentando temperaturas históricas para el mes de junio, entre ellos Alemania, Polonia y la República Checa.
En Reino Unido, la policía alertó de los riesgos de enfriarse en ríos y lagos después de que una niña de 12 años se ahogara en Manchester.