Entregan solicitud al Congreso del estado

• Argumentan que salud física es ideal para hacer frente al coronavirus

Chetumal.- Por lo menos 100 empresas ligadas al deporte entregaron una solicitud oficial al Congreso del estado para exigir la reapertura de los gimnasios en Quintana Roo con el color naranja del semáforo epidemiológico, todo bajo el argumento de que la actividad física es ideal para hacer frente a Covid-19.

Luis Tamay, representante de la Promotora de Fisicoconstructivismo y Deportes en México (Profidemex), informó que el documento está firmado por cerca de 150 empresas deportivas en el estado, tales como distribuidoras de suplementos alimenticios, ropa deportiva, accesorios, clubes, gimnasios, promotores y entrenadores independientes. “Lo que estamos solicitando al Congreso es la posibilidad de que volvamos a abrir nuestros negocios cuando el semáforo epidemiológico se encuentre en color naranja en el estado, en este caso, en los municipios del norte”, señaló.

El argumento que sostienen es que “las autoridades de salud han confirmado que la actividad física fortalece el sistema inmunológico, lo cual es de vital importancia para contrarrestar los síntomas del coronavirus. Por otro lado, la urgencia económica que tenemos todos los negocios de este giro, que se ha visto frenado ya por cinco meses, lo cual se ha vuelto insostenible”, recalcó.

Agregó que también se comprometen a cumplir con todos los protocolos de las autoridades de salud, para evitar que sus negocios se conviertan en un foco de infección. “Nuestra propuesta es que, en caso de que nos concedan la petición, de nuestra parte cumplamos con la responsabilidad de proporcionar todas las condiciones sanitarias para nuestros clientes, para que nuestros centros de trabajo no se conviertan en centros de infección”.

Durante las últimas semanas, en Cancún, propietarios de gimnasios han realizado algunas marchas y manifestaciones, para hacer esta misma petición a las autoridades del estado, no obstante, hasta ahora no han sido escuchados, pues las autoridades de salud en los tres órdenes de gobierno han insistido en señalar que, por su actividad, los gimnasios pueden propiciar las condiciones necesarias para que el virus se propague con mayor facilidad, pues los usuarios expulsan sudor y fluidos.

Ante ello, los empresarios se han comprometido a desinfectar las instalaciones de manera constante, instalar tapetes desinfectantes y dispensadores de gel antibacterial, además de limitar el cupo para lograr una sana distancia, entre otras medidas.

Taxistas demandan aumento de tarifa

Todos los gremios generadores de ingresos en el estado han sido gravemente afectados y mientras los dueños de los gimnasios están impedidos para trabajar, los taxistas por su parte demandan un aumento de tarifa, a fin de contrarrestar los estragos económicos derivados de la pandemia.

Así, los cuatro sindicatos de taxistas más grandes de Quintana Roo solicitaron permiso al Instituto de Movilidad para incrementar temporalmente hasta 20 por ciento sus tarifas.

Sergio Cetina Valle, líder del Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler (Suchaa) en Chetumal, expuso que esta propuesta fue planteada durante la última reunión sostenida con el Imoveqroo. El instituto por su parte, sostuvo que, también se recibieron solicitudes similares de los sindicatos de Cancún, Playa del Carmen y Tulum, con el argumento que sólo de esta manera podrán mantener el servicio a 50 por ciento de su capacidad.

“El uso del cubrebocas, la desinfección de las unidades y la sana distancia en los sitios de abordaje eran medidas que nosotros ya aplicábamos antes de hacerlas oficiales. Pero eso de limitar a solo dos pasajeros por viaje son cuestiones que sí nos afectan. Ya que menos familias querrán hacer uso de nuestro servicio”, afirmó el dirigente del Suchaa.

Según los datos de ese sindicato, entre marzo y mayo 90 por ciento de los más de 2 mil conductores de taxis no registraron ningún ingreso y aunque desde junio se han reactivado la mayoría, apenas ganan entre 100 a 150 pesos diarios, lo cual no es suficiente para cubrir sus necesidades básicas.