Empresas globales que representan el 40% de Inversión Extranjera Directa en el país y los industriales del país afirmaron que la reputación de México está en duda, con el creciente deterioro de la certidumbre jurídica, por la expropiación de las vías férreas que realiza el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

Tras los hechos ocurridos en las instalaciones de Ferrosur, propiedad de Grupo México el pasado viernes 19 de mayo, el Consejo de Empresas Globales en México (CEG) expresó “vemos con preocupación el creciente deterioro de la certidumbre jurídica necesaria para que esas y otras inversiones lleguen al país”, justo cuando México podría ser el receptor de 2 a 4 millones de empleos formales y cerca de 30,000 millones de dólares derivados del nearshoring.

Las 62 grandes empresas internacionales que operan en México calificaron al hecho de la expropiación como un “mensaje equivocado porque pone en duda el respeto a las garantías constitucionales y a los marcos jurídicos que protegen la inversión. Es crucial que todo gobierno se ajuste a la ley y evite tomar acciones que puedan ser percibidas como arbitrarias”.

La ocupación “temporal” de las vías férreas en Veracruz por parte de la Marina manda un “terrible mensaje” para el impulso económico en el sur del territorio mexicano, que mina la confianza de los inversionistas, advirtió la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).

Los empresarios recordaron que la semana pasada, el gobierno federal prometía incentivos fiscales a los inversionistas que realizaran negocios en el Sur sureste del país para detonar el Itsmo de Tehuantepec, y ahora expropia la ruta del ferrocarril en el tramo de Veracruz.

“Actuar precipitadamente, tomando instalaciones, independientemente de los argumentos, para acelerar las obras del Corredor Interoceánico, generará un efecto contrario al que se busca: atraer inversión privada para generar empleos, desarrollo económico y bienestar que acabe con la desigualdad de una de las regiones más pobres de México”, acotó el organismo privado.

La Canacintra manifestó su preocupación y rechazo ante la ocupación temporal “sorpresiva” por parte de elementos de la Marina Armada de México el pasado 19 de mayo, a solicitud del Gobierno Federal, de las líneas ferroviarias concesionadas e instalaciones de Ferrosur en el tramo Medias Aguas – Coatzacoalcos, como medida de presión a la empresa.

El sector privado advirtió que de nada sirve que el gobierno federal anuncie con “bombo y platillo” estímulos fiscales para la atracción de inversiones nacionales y extranjeras, si una semana después se asesta un golpe que mina la confianza en el actuar y el estado de derecho.

Los industriales se solidarizaron con Grupo México de transportes y sus trabajadores, proveedores de servicios logísticos a industrias afiliadas, no sólo en la región en el tramo ferrovial de 120 kilómetros “ocupado temporalmente” sino también en el resto del país.