Cometa 3I/ATLAS acelera su salida del sistema solar y sorprende a la NASA
🔸 El misterioso visitante interestelar deja huellas de agua en su camino
#TECNOLOGÍA || El cometa 3I/ATLAS, el tercer objeto interestelar detectado en visitar nuestro vecindario cósmico, volvió a dar señales de vida tras cruzar detrás del Sol. Pero no sólo eso: ¡ahora se está acelerando! Y no, no es que quiera escapar de la Tierra, sino que la ciencia tiene varias teorías de por qué está pasando esto.
Este visitante del espacio profundo pasó a una velocidad de 68 kilómetros por segundo en su punto más cercano al Sol, el pasado 29 de noviembre, y desde entonces ha ganado velocidad mientras se dirige hacia las afueras del sistema solar.
El científico Davide Farnocchia, del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA, indicó que el cometa estaría presentando una aceleración tras haber pasado el perihelio.
La explicación está en dos fenómenos:
Efecto honda: el impulso que obtiene un objeto al pasar cerca de un cuerpo más grande, como cuando las sondas espaciales ganan velocidad con la gravedad de planetas gigantes.
Aceleración no gravitacional: y no, no es que una nave alienígena lo empuje. Es que al perder agua y gases por el calor del Sol, el cometa literalmente se impulsa con sus propios chorros.
Actualmente, 3I/ATLAS se aleja del Sol a más de 58 km/s. Si nada lo frena, alcanzará la órbita de Júpiter en el primer tercio del 2026. Y aunque se aleja, los científicos lo siguen con lupa, porque no todos los días nos visita un objeto de 10 mil millones de años.
Además, tiene agua, algo que emociona a los astrónomos, ya que es una pista más de que los ingredientes de la vida están por todo el universo.
El brillo del cometa también ha aumentado, y aunque se sabe que eso pasa cuando se acercan al Sol, aún no está claro si este resplandor es por reflejo o por una erupción de gases y polvo.
El cometa 3I/ATLAS podría tener hasta 10 mil millones de años. Sí, más del doble de viejo que nuestro sistema solar. En otras palabras: vino de un rincón muy lejano del universo… y sobrevivió para contarlo.





