Parece que Donald Trump no sale de una cuando está metiéndose en otra, debido a que apenas ayer se informó sobre el desplome que está teniendo su popularidad a menos de 100 días de la elección presidencial, y ahora, un juez federal le puso de plazo hasta el 11 de agosto al gobierno del mandatario norteamericano para informar sobre las medidas que ha tomado para cumplir con el fallo del Tribunal Supremo con respecto al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés); a través del mencionado programa se protege de la deportación a aproximadamente 650 mil jóvenes, mismos que arribaron a suelo estadounidense sin contar con papeles. 

Cabe destacar, que la decisión tomada por el Tribunal Supremo obliga a la administración que encabeza el presidente Donald Trump a continuar tramitando las extensiones de los permisos y a aceptar las solicitudes de los nuevos candidatos del DACA, programa creado en el ya lejano 2012, por el entonces presidente Barack Obama; por medio de esta iniciativa se regulariza, por un determinado periodo, a los jóvenes indocumentados que llegaron al país de la mano de sus padres. 

Es importante resaltar que a mitad del pasado mes de junio, dicho tribunal desechó la decisión del presidente Trump, quien había dado por terminado el mencionado programa, esto por considerarla “arbitraria y caprichosa”. Esto dejó abierta la posibilidad de que el Gobierno presentara de nuevo su posición, sustentándola en argumentos, pero no los ha presentado hasta el momento. 

Los trámites pendientes incluyen a unos 650 mil beneficiarios del DACA que han de renovar los permisos, y también a más de 300 mil nuevos solicitantes, entre los que se cuentan alrededor de 55 mil personas que en los últimos tres años han cumplido la edad para ampararse en el programa.