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Abarrotan playas de Cancún sin seguir protocolos contra COVID-19

Este 16 de septiembre, día de asueto, no fue muy diferente al de años previos, pese a que nos encontramos aún en medio de la pandemia por COVID-19, las playas de Cancún, como Langosta y Tortugas, lucieron abarrotadas.  

Se instalaron menos camastros de los que generalmente se colocan porque se debe cumplir con la sana distancia, pero no fue suficiente el espacio respetado, y las familias que no gastan en la renta de estas sombrillas, encontraron algún punto de la playa para acomodar sus pertenencias, sin respetar los protocolos. 

Sombrillas, mesitas, sillas, bocinas, botanas y también bebidas alcohólicas (que en las playas vigiladas está prohibido ingresar), son los básicos con los que llegaron familias enteras o grupos de amigos desde muy temprana hora y que no dejaban de ingresar aún después de las 2 de la tarde. 

  • Al ingresar a la playa no hay nadie tomando la temperatura, ni proporcionando gel antibacterial (Fotografía: Guadalupe Villareal)
  • La mayoria de los bañistas fueron cancunenses, sin embargo también hubieron visitantes nacionales (Fotografía: Guadalupe Villareal)
  • Al ingresar a la playa no hay nadie tomando la temperatura, ni proporcionando gel antibacterial (Fotografía: Guadalupe Villareal)
  • La mayoria de los bañistas fueron cancunenses, sin embargo también hubieron visitantes nacionales (Fotografía: Guadalupe Villareal)

La mayoria de los bañistas fueron cancunenses, sin embargo también hubieron visitantes nacionales (Fotografía: Guadalupe Villareal)

La mayoría de los bañistas son cancunenses, sin embargo, al lugar también llegan visitantes nacionales, quienes aprovechan para adquirir algún tour o cruce a Isla Mujeres, incluso los vendedores señalaron que cada vez venden más y a los mismos precios de siempre, sólo con algunos descuentos para grupos grandes. 

La nueva normalidad en playas como Tortugas no se nota, pareciera que es un día como tantos otros, en el que no existe el COVID-19 y que desafortunadamente podría provocar severas consecuencias. 

Al ingresar a la playa no hay nadie tomando la temperatura, ni proporcionando gel antibacterial, y es que autoridades de Zofemat han señalado en varias ocasiones que esta es una playa concesionada, tal vez a eso se deba la falta de vigilancia y el abuso en el estacionamiento que debería ser público, pero en donde cobran 50 pesos por auto estacionado.