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Día de Muertos: cierre de panteones en Cancún no detiene la venta de flores

Ante el cierre de cementerios, los comerciantes cambiaron sus puntos de venta.

Pese a que las autoridades decidieron cerrar los panteones en el marco de la celebración del Día de Muertos, los vendedores de flores y adornos alusivos a la fecha, señalaron que hubo demanda “suficiente para sacar para los frijoles”, expresó doña Carmen.

Tras colocar en casa el altar a sus padres e hijo, ella instaló sus cubetas para intentar vender -afuera de unos de los camposantos más concurridos- algunos de los tradicionales ramos de cempasúchil que adquirió para la fecha.

Aunque no se permitieron visitas, hubo ciudadanos que no se enteraron de la disposición oficial, por lo que al encontrar las puertas cerradas optaron por comprar flores de diversos colores para adornar las ofrendas caseras.

“Sabíamos que no se iba a vender como en otros años, pero no hay de otra, tenemos que vender para sacar por lo menos lo de la comida. El clima tan siquiera ha sido amable, sin tanto calor no se han marchitado las flores,  por lo que no tuve que deshacerme de tantas”, dijo.

Vendedores cambian los panteones por los tianguis y el mercado 23 de Cancún

Mientras que algunos de los comerciantes decidieron cambiar de lugar para probar suerte en otros lados, tal es el caso de Nestor Moran, quien trajo su mercancía desde el estado de Puebla y quien tradicionalmente la ofrecía en el Mercado 23, pero que este año optó por los tianguis para intentar una nueva estrategia ante la pandemia.

“Pensamos en los tianguis porque muchos no tienen el tiempo o posibilidad de ir hasta allá. No nos ha ido mal, porque es algo novedoso para la gente de aquí, pero a Dios gracias ahí vamos, yo espero terminar hoy porque es producto que solo lo podemos vender ahorita, si se queda dulce es perdida para nosotros, así que probablemente tengamos que rematarlo”, dijo.

El comerciante señaló que a diferencia de la gente que va al Mercado 23, quienes acuden al tianguis no tienen el propósito de comprar cosas para su altar, sino que van por algún otro motivo, como la compra de comida para la semana u otros artículos para el hogar, factor al que atribuyó tener una venta más baja que el año anterior.